

Raimundo está habituado a colaborar con artistas internacionales, como lo demuestran sus trabajos junto a B.B. King (en el vídeo superior, con interpretando el tema de Cathy Claret Bolleré) y Björk. Pero reconoce que esta vez ha sido diferente. "Lo que pasa es que a Howe… es que no sé ni pronunciar su nombre, yo le digo 'Jau'… no lo conocía ni na. Yo era superfan de Björk, estaba enamorado de su voz, y los Sugarcubes molaban mucho. Y de B.B. King no te digo na... A mí ya me sorprendió cuando grabé la primera vez con Camarón. Escuchaba sus discos y no sabía que iba a terminar con él tocando, pero por lo menos pensaba: 'Está aquí, es más posible'. Pero ellos que están en el quinto coño, no te lo imaginas y de repente te ves tocando con ellos, y te da un subidón que te cagas".

Después de comer, salimos a la calle. Compruebo que ir con Raimundo provoca situaciones insólitas: un grupo de chicas con traje de faralaes camino de la Feria -mi primer encuentro con la belleza de las mujeres cordobesas, algo realmente fuera de serie-, exclama al verlo "¡Santana!" e insiste en hacerse una foto junto a él. Tras confesarme que está enganchado al vinilo, entramos en una tienda llamada Amigos del Disco. Su dueño es Bartolomé Jaén, presidente de la Asociación de Amigos del Disco.

El ex Pata Negra empieza a revolver entre los estantes y compra el álbum homónimo de Lole y Manuel de 1977 donde aparece fotografiado de muy joven. Le muestro vinilos de Albert Collins y Lucky Peterson y los conoce a todos. Pregunta si tienen algo de Stevie Ray Vaughan. En esos momentos, la antigua rocola (en la foto de la derecha) que preside el establecimiento está sonando, aunque por su antigüedad logra el milagro de transformar una canción de Van Morrison en un vetusto hillbilly de los años veinte. Y en esas parece Murky de 'Melodías pizarras' de Radio 3 en busca de material para su programa, junto a Estela Aparisi, la chica de promoción de Eureka, y el colega David Saavedra, en representación de ‘El Mundo’.
Antes de irnos, Óscar García nos hace una foto a Ignasi Julià y a mí con sendos vinilos: él ha escogido bien, la banda sonora de Phantom Of The Paradise (Brian De Palma, 1974); yo, como siempre, en mi línea de freakismo, sostengo entre mis manos un grandes éxitos de Los Indios Tabajaras. Nunca cambiaré…

1 comentari:
Jajaja! Me encanta ver la foto y recordar el momento en el que la hicimos!
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